El buen humor es contagioso, y se propaga tan fácil y rápido como la gripe, según un nuevo estudio. La felicidad se esparce por las redes sociales muy rápidamente, de usted puede pasar a su amigo, y al amigo de su amigo, y al amigo de este, ya más lejos se difumina.
Un grupo de investigadores de la Universidad de California, investigaron a 5000 personas interconectadas durante un período de 20 años.
Después de establecer un tipo de humor de base para cada uno de los participantes, el equipo descubrió que cuando una persona estaba feliz, esa felicidad se esparcía como una onda por la red social, incrementando la probabilidad de que otros se volviesen más felices también.
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